sábado, 8 de noviembre de 2014

MONSTRUOS DE PELICULA


Dese hace años la imaginación de escritores como de cineastas ha creado infinidad de monstruos y leyendas los cuáles se han hecho tan famosos que mucha gente afirma haberlos visto en vivo y a todo color, éstos son algunos de los monstruos más famosos a través de décadas, así como la historia de cada uno de ellos.
DRÁCULA


Aún hoy, todavía existen discrepancias sobre si en verdad existieron (y existen) personas que chupan la sangre a sus víctimas para sobrevivir. Según los expertos, a un humano de nada le vale chupar sangre, ya que su estómago no puede digerirla y lo más probable es que la expulse mediante el vómito. Si esto es así, ¿de dónde viene la creencia de que bebiendo sangre se alcanza la inmortalidad?
Antiguamente, los hemofílicos (enfermos con falta crónica de hemoglobina) han intentado inútilmente beber sangre para curar su mal y para ello no han dudado en matar carneros nonatos, niños recién nacidos y, sobretodo, doncellas vírgenes. Detrás de ello no siempre estaba el deseo de ver curada su enfermedad, sino que en la mayoría de las ocasiones era una excusa para la venganza o la orgía sexual.
Pero no será hasta el siglo XV en que un siniestro personaje llamado Vlad Tsepech Drácula, príncipe de la rumana Valaquia, decide pasar a la historia como el primer vampiro humano de prestigio. Descendiente de la estirpe "Draco", los dragones de la guerra, traducción latina de "Drácula", este victorioso señor no tiene piedad con sus enemigos y en venganza porque los turcos le hicieron prisionero cuando era joven y se vio en la obligación de comer ratas para sobrevivir, cuando consiguió la victoria llegó a empalar hasta 100.000 prisioneros, a los cuales situó delante de su castillo. Además, para que su obra no fuera olvidada jamás, organizó banquetes multitudinarios delante de su macabra exposición.
Cuando murió, sus enemigos le cortaron la cabeza y le enterraron así en dos tumbas para evitar que volviera del otro mundo para vengarse. De poco les sirvió, ya que unos años después sus tumbas aparecieron abiertas y sin restos del tirano. Desde entonces, el vampiro sale todas las noches por tierras de Rumania y sacia su sed de sangre con mujeres y niños indefensos.
Un siglo después nace una aristócrata húngara llamada Elizabeth Bathory, la cual tiene un hijo ilegítimo a los catorce años y para evitar la deshonra se casa con un noble y se va a vivir al castillo de Csejthe. Pero como la cabra siempre tira al monte y solamente es cuestión de dejarla en libertad, cuando su marido se iba a la guerra esta mujer se dedicaba a mantener relaciones sexuales con mujeres, personajes sombríos y cuantos brujos conocía. No satisfecha con ello, torturaba de mil maneras a las mujeres de su servidumbre, especialmente a las más guapas, y cuando empezó a notar las primeras arrugas en su rostro las mataba después de hacer el amor con ellas y utilizaba su sangre aún caliente como agua de baño. Cuando fue descubierta, su marido contribuyó a ello, la emparedaron viva en una de las habitaciones del castillo y hay quien dice que sus gritos de dolor y venganza se siguen oyendo desde entonces.
Y así, la figura del vampiro decae en la mente de las gentes hasta que la literatura la rescata tres siglos después, pero ahora, afortunadamente en personajes literarios. William Polidori, un escritor amigo de Lord Byron y la célebre Mary Shelley, escribe "El vampiro" la misma noche en que Mary esboza la historia de "Frankenstein". Corría el año 1819 y un vampiro literario llamado Lord Ruthven llega al New Monthy Magazine, pero la novela es casi un fracaso absoluto, hasta el punto en que su creador murió pobre y sin prestigio alguno, al menos en vida.
El tiempo hace justicia a quien se lo merece, casi siempre tarde, y años después el mismísimo Alejandro Dumas lleva esta desconocida obra al teatro con gran éxito. Hay quien asegura, no obstante, que otros autores como Burger y el alemán Goethe habían tocado ya el tema del vampirismo en obras como "Eleonora" y "La novia de Corinto".
Otros escritores que se apuntaron al tema de los chupadores de sangre (quizás una metáfora contra los aristócratas de entonces), fueron Thomas Preskett con "Varney" y Joseph Sheridan con "Carmilla", personaje tenebroso que el cine revivió muchos años después en dos películas.


FRANKENSTEIN


No es que la idea de construir un hombre perfecto sea nueva (a fin de cuentas, Dios también trató de hacerlo, con bastante desatino, por cierto) y aunque sabemos que también lo intentaron civilizaciones tan perfeccionadas como los egipcios, ningún otro intento ha sido llevado tantas veces a la pantalla como el de "Frankenstein o el nuevo Prometeo".
De Prometeo sabemos que era un dios, el cual robó el fuego para dárselo a los humanos y en castigo Zeus le ató a una roca para que un águila le comiese el hígado poco a poco.
Sin embargo, su hígado se regeneraba noche tras noche y al final fue liberado por Hércules y desde entonces la humanidad le adora como el dios del fuego.
Pues ese Prometeo fue plasmado varias veces en la literatura, aunque la obra más famosa fue "Prometeo libertado", de un tal Shelley, amigo íntimo de Lord Byron. Los aficionados a leer novelas ya estarán sacando sus conclusiones a raíz de estos nombres y enlazarán a la autora Mary Shelley con estos dos señores, con bastante razón, ya que el primero era su marido y el segundo su amigo.

MARY SHELLEY



El verdadero nombre de Mary Shelley era Mary Wollstonecraft Godwin y había nacido el 30 de Agosto de 1797 en Ginebra, saltando a la fama en 1819 con su novela "Frankenstein o el moderno Prometeo", después de intentar durante tres años que alguien se la publicara.

EL HOMBRE LOBO


Si hay quien pueda pensar que este personaje siniestro es fruto de la imaginación de los escritores, les recordaré que la historia real está plagada de extraños seres con apariencia de lobo que se dedicaron a cometer toda clase de crímenes. Se conocen datos fidedignos que provienen del siglo XVI y XVII los cuales nos hablan de asesinos con poderes demoníacos, quienes tomaban aspecto de lobo cuando había luna llena y devoraban a todo ser vivo, animal o humano, que se ponía a su alcance. Además, los autores nos cuentan que las personas mordidas, si no morían, entraban en una fase de delirio que les convertía también en monstruos.
La licantropía, pues, está descrita en cualquier enciclopedia que se precie y tiene su origen en un rey mitológico llamado Lycaon, quien se rebeló a Zeus y fue condenado por ello a convertirse en lobo. Después, la naturaleza ha vuelto a repetir en numerosas ocasiones este fenómeno y continuamente salen en los diarios noticias de familias enteras afectadas por este "síndrome del hombre-lobo", llenos de pelo por todo el cuerpo, especialmente la cara, casi desde su nacimiento. Los médicos lo denominan simplemente "hirsutismo" generalizado, pero lo cierto es que no pueden explicar la naturaleza del fenómeno que se hace muy dramático en las mujeres.
Aunque el cine haya exagerado la transformación de estas personas, y no sea cierta la creencia de que solamente pueden morir con balas de plata, sabemos que por algún motivo estos (enfermos) están muy nerviosos en las noches de luna llena y su mordedura provoca en sus víctimas una enfermedad contagiosa a veces mortal, con similitud a la rabia.

LA MOMIA


Parece ser que la idea de que las momias egipcias podían volver a la vida y vengarse de todos aquellos que habían osado profanar sus tumbas, viene desde que en 1922 se descubrió la tumba de Tutankamon y en ella se encontró una escritura que avisaba de mil males contra quienes habían entrado a molestar a los difuntos. Una vez levantada pacientemente la dorada tapa y eliminada la resina negra que recubría el ataúd internamente, apareció la momia del joven faraón, con el rostro y los hombros cubiertos por una máscara de oro, piedras preciosas y vidrio azul. Coronada por una cabeza de buitre que simbolizaba la soberanía sobre el Alto Egipto y los ojos de cuarzo y obsidiana, el rostro que representaba a Tutankamón tenía una belleza esplendorosa. Cuando descubrieron parcialmente a la momia se encontraron con un aceite de embalsamamiento que era una mezcla de esencias de anís, tomillo, orégano y própolis, unidas con alquitrán y exudados del propio cuerpo del difunto, quizás sangre y linfa. Junto a estos compuestos se encontraban otros, alcaloides entre ellos, cuya misión en el embalsamamiento no estaba clara y que podían ser las sustancias que habían reaccionado a través de los siglos y que ocasionaron los delirios de los exploradores.
 La casualidad, o la maldición egipcia, quiso que varios arqueólogos murieran en circunstancias extrañas (aún hoy se cuentan casos más recientes).

EL MONSTRUO DE LA LAGUNA NEGRA


Inspirado en la película rusa "Tchelovek Amfibia" y en una historia contada por los nativos del Amazonas, donde se hablaba de una raza de criaturas capaces de vivir tanto dentro del agua como fuera, el escritor Maurice Zimm publicó un relato de terror en el cual una expedición americana se adentró en la selva amazónica esperando encontrar el eslabón de la creación: un ser bípedo, un celacanto, de estatura y apariencia humana, pero con escamas en lugar de piel y agallas como orejas. En ese relato se hablaba cómo ningún miembro de dicha expedición volvió nunca y cuando fueron en su búsqueda solamente encontraron una cámara de fotos. Una vez reveladas las fotografías, en una de ellas vieron a una criatura de más de dos metros de altura, puesta en pie amenazadora, pero con una piel que recordaba a un pez.
 Este asombroso cuento fue escuchado por el productor William Alland durante una cena en casa de Orson Welles, y aunque en esos momentos estaba ocupado en promocionar a las nuevas estrellas Rock Hudson y Tony Curtis, su afición al cine de terror le hizo esbozar muy rápidamente un relato de apenas tres páginas, titulado "The sea monsters", en la cual quería reflejar una nueva versión de La Bella y la Bestia.

EL ZOMBIE


El cine de zombis surgió en los años 1930 como reflejo del folclore y las leyendas haitianas asociadas a la magia negra y el vudú. Dicho folclore llegó al público americano de la mano de William Buehler Seabrook que, en su libro The magic island relataba sus experiencias en Haití. Entre los ritos recogidos por Seabrook se encontraba uno mediante el cual un hechicero podía, supuestamente, revivir a los muertos y privarlos de voluntad para hacerlos trabajar a su servicio. El 10 de febrero de 1932 se estrenó en Broadway una obra de Kenneth Webb titulada Zombie, que estaba libremente basada en la novela de Seabrook.

La obra de Webb fue retirada de cartel después de tan sólo 21 representaciones. Sin embargo, dos hermanos, Víctor y Edward Halperin, que en la década anterior habían fundado una productora de cine, repararon en ella. El guionista Garnett Weston fue el encargado de recoger las premisas de la obra de Webb en un guion cinematográfico. Webb trató de paralizar la película, que consideraba un plagio, pero no tuvo éxito en su empeño. Así nació la que sería la primera película de zombis de la historia, White Zombie (La legión de los hombres sin alma - 1932).

La película ya recogía casi todos los tópicos que definirían el cine de zombis durante más de treinta años: un villano posee una legión de zombis que trabajan para él, y que son el instrumento para sus siniestras intenciones. Sin embargo, hay que decir que dicho argumento no era del todo original, pues recuerda claramente a El gabinete del doctor Caligari (1920) de Robert Wiene. A pesar de contar con el protagonismo de Béla Lugosi, White Zombie cosechó malas críticas, entre otras cosas porque tan sólo el quince por ciento del metraje era sonoro. Sin embargo el público la apoyó con entusiasmo y la convirtió en una película muy rentable para su distribuidora United Artists.

En 1 de noviembre del 2010 se estrenó la serie de televisión en Fox The Walking Dead basada en el comic del mismo nombre, donde un sheriff después de haber recibido un balazo en una persecución, despierta en un hospital y se da cuenta que está en un mundo recientemente destruido por una epidemia que convierte a todos en zombies, aunque en su caminar para buscar a su familia se encuentra a muchos supervivientes que no han sido infectados.

En junio 29 de 2013 se estrena Guerra mundial Z inspirada ligeramente por la novela world war z pero con muy grandes diferencias con lo que se puede considerar una historia alterna aquí los zombies conservan características a los presentes en 28 days later y soy leyenda siendo muy rápidos y violentos pero además se añade una inteligencia entre todos los zombies, una conciencia común similar a la de un enjambre o marabunda de insectos tales como una colonia hormigas, a diferencia de 28 days later los zombies si son individuos muertos ya que sus tejidos se corrompen con el paso del tiempo además de alguna forma son selectivos con sus presas evadiendo a individuos enfermos o heridos de gravedad.

No hay comentarios :

Publicar un comentario