Tzitzimitl

En la mitología azteca , un tzitzimitl (Tzitzimimeh plural) es una deidad asociada con las estrellas. Se les describe como esqueléticas figuras femeninas con faldas a menudo con diseños de calaveras y tibias cruzadas. En las descripciones posteriores a la conquista que a menudo se describe como " diablos "o" demonios "- pero esto no refleja necesariamente su función en el sistema de creencias prehispánicas de los aztecas.

El Tzitzimimeh eran deidades femeninas, y como tal, relacionado con la fertilidad, que se asociaron con la Cihuateteo y otras deidades femeninas, tales como Tlaltecuhtli , Coatlicue , Citlalicue y Cihuacóatl y eran adorados por las parteras y las mujeres parturientas. El líder de la tzitzimimeh era la Diosa Itzpapalotl que era el gobernante de Tamoanchan - el paraíso donde el Tzitzimimeh residía.

El Tzitzimimeh también lo asociaron con las estrellas y, sobre todo de las estrellas que se pueden ver alrededor del Sol durante un eclipse solar. Esto fue interpretado como el Tzitzimimeh atacar el Sol, esto provocó la creencia de que durante un eclipse solar, los tzitzimime descenderían a la tierra y devorar a los seres humanos.

El Tzitzimimeh se temía también durante otros períodos nefastos del mundo azteca, tales ya que durante los cinco días aciagos llamados Nemontemi que marcó un período inestable de la cuenta de los años , y durante la ceremonia del Fuego Nuevo que marca el comienzo de una ronda de nuevo calendario - ambos eran períodos asociados con el miedo al cambio.

El Tzitzimimeh tenía un doble papel en la religión azteca: eran protectresses de lo femenino y progenitresses de la humanidad. También eran poderosos y peligrosos, especialmente en períodos de inestabilidad cósmica.En la mitología azteca, los Tzitzimime son demonios celestiales que intentan continuamente destruir el mundo. Se les considera también estrellas femeninas que intentar impedir que el sol nazca atacándolo al amanecer y anochecer, pero sobre todo durante los eclipses. El quinto sol, Nahui-Ollin (Cuatro-Movimiento), porque está destinado a desaparecer por la fuerza de un movimiento o temblor de tierra, momento en el que aparecerán los monstruos del Oeste tzizimime, con apariencia de esqueletos, y matarán a toda la gente. Quetzalcóatl, junto con Xólotl, creó a la humanidad actual, dando vida a los huesos de los viejos muertos con su propia sangre. El Sol presente se sitúa en el centro, quinto punto cardinal y se atribuye a Huehuetéotl, dios anciano del fuego, porque el fuego del hogar se encuentra en el centro de la casa.(En una de las otras versiones se dice que los Dioses no querían hacer más intento de hombres escondiendo los huesos en Mictlan, pero Quetzalcóatl bajo por ellos y creo de nuevo a los hombres).

Realmente sobre la Leyenda Del Quinto Sol se pueden apreciar varias versiones, algunas traducidas de códices escritos y otras modificadas de esos códices,una versión más este mito es de los aztecas y mayas y fue recogida por Bernardino de Sahagún.Hay muchas versiones muy interesantes, unas más aceptadas que otras. Sin embargo está presente en otras mitologías registradas por los misioneros de Indias, venidos a América en los primeros años del siglo XVI. Otra versión muy conocida de este mito es la que se encuentra en el Popol Vuh, un libro quiché donde se narra, además de la creación del mundo, la epopeya de los hermanos Hunahpú e Ixbalanqué.

Para los aztecas y mayas el Quinto Sol fue creado en la antigua ciudad de Teotihuacan.

Se dice que el quinto sol murió al momento de ser conquistadas las tierras Mexicas por el hombre blanco, dando así el nacimiento del sexto sol.

De ellas se creía que vendrían para vivir tras el fin del mundo, así como que colgaban por la noche sobre los cruces de caminos esperando a algún humano.

La más importante es Itzpapálotl. Otra de ellas fue la abuela de Mayáhuel que participó en el mito de la creación del Maguey.

FUENTES: http://en.wikipedia.org/wiki/Tzitzimitl
http://es.wikipedia.org/wiki/Tzitzimime